La Comisión Europea (CE) sigue tomando medidas para paliar la economía comunitaria ante el conflicto entre Rusia y Ucrania. Esta vez tomó acciones que beneficiarán al sector hortofrutícola. Se trata de excepciones en la normativa productora para el año 2022. Las mismas se refieren al valor de la producción que se comercializa y ayudas financieras recuperadas.
El Reglamento Delegado (2022/1623) se publicó el miércoles en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE). Allí se precisó qué excepciones aprobó la CE al Reglamento 2017/891. Específicamente indica que si en 2022 “el valor de un producto se reduce al menos un 35 % por motivos ajenos a la responsabilidad de la organización de productores (OP), se considerará que el valor de la producción comercializada de ese producto representa el 100 % de su valor en el período de referencia anterior”, explicó EfeAgro.
Igualmente, entre las excepciones está que los países miembro no tienen la obligación de fijar en su “Estrategia Nacional” el porcentaje máximo del fondo de operatividad. Es decir, los que pudiesen dedicarse a una medida individual o acción tipo. La finalidad es que se garantice un balance entre las varias medidas tomadas.
Otra importante decisión fue la de no reembolsar al Fondo Europeo Agrícola de Garantía Agraria (Feaga) las ayudas financieras dadas por la Unión Europea para obligaciones plurianuales. Por ejemplo, las operaciones medioambientales si los objetivos trazados a largo plazo y beneficios no se cumplan en 2022 por la crisis generada por la guerra entre Rusia y Ucrania.
El documento presentado por la CE indicó que son muchas las dificultades que enfrenta el sector hortofrutícola. Todos los estados miembros padecen las consecuencias del conflicto bélico en la productividad de frutas y hortalizas. Sus asociaciones y productores organizados han tenido inconvenientes múltiples y excepcionales para planificar, gestionar y ejecutar sus programas operativos. El retraso es inminente.
Hay una vulnerabilidad latente en el sector. La invasión a Ucrania ha generado interrupciones en la cadena de suministros. Esto por los aprietos financieros y fallas en la tesorería que sufren. Igualmente, se enfrentan a problemas de logística. Se les ha hecho cuesta arriba hallas mano de obra para las cosechas. También, les cuesta llegar a los consumidores.
Por su parte, empresas como Enguix apoya a los productores españoles ofreciéndoles la mejor maquinaria agrícola posible. Rotocultivadores y trituradoras de alta tecnología se hallan en su catálogo. Esperan que estas medidas ayuden al sector rural con el que trabajan de la mano.