Skip to main content

La campaña del olivar 2018-2019 inició un poco tarde en España, pero augura buenos resultados. Pese a las variables meteorológicas y sus efectos en la fenología de los olivos, este promete ser un buen año para el sector. La producción es buena y la competencia en el mercado será baja, prácticamente nula.

La Junta de Andalucía ha estimado que en el país se recogerán 1.550.000 toneladas de aceite. La cifra podría variar de acuerdo al rendimiento del fruto. No obstante, aún así superaría las 931.654 toneladas obtenidas en 2017-2018.

El panorama para España es muy positivo, por la cantidad y la calidad de la producción. Sus perspectivas tienden a ser mejores por la ausencia de competidores. Italia y otros países dedicados al cultivo del olivo enfrentan la peor campaña de la historia. Heladas, lluvias y enfermedades como la Xylella fastidiosa han destruido las siembras y limitado el trabajo de campo.

Abastecer el mercado nacional e internacional

Datos de la última mesa sectorial de aceite refieren que hay en existencia 374.800 toneladas del producto, correspondientes a la campaña anterior. Tal vez el aceite de olivo suficiente para abastecer el mercado nacional hasta la producción del nuevo. Esto, debido a los retrasos en el inicio de la campaña, que ha debido darse 15 o 20 días atrás.

En cuanto a la producción de 1.550.000 toneladas de aceite, organizaciones agrarias han dicho que esto alcanza para cubrir el déficit de otras naciones. Italia en mayor medida, Grecia, Turquía, Portugal y Túnez, sobreviven a campañas desastrosas. De allí que el aceite de olivo español podría cubrir la demanda nacional e internacional.

Campaña del olivar permitirá que todos ganen

Las condiciones favorables de la campaña del olivar 2018-2019 abren paso a la buena comercialización. Productores y organizaciones agrarias han llamado a mantener los precios, abastecer el mercado de manera estable y evitar estrategias dañinas.

En ausencia de competidores, una buena o mala facturación dependerá del mecanismo de comercialización. El Gobierno andaluz ha destacado que los buenos pronósticos deben ser tomados con cautela, aún cuando esta sea la mejor de las últimas cinco campañas.

La Asaja (Asociación agraria de jóvenes agricultores) ha agregado además que existe la necesidad de concentrar la oferta en grandes grupos cooperativos e industriales. Estructuras fuertes y la participación de profesionales en el área, garantizarían que los precios no bajen de los tres euros, media esencial para la rentabilidad del sector.

Crecerán las exportaciones

La propuesta de activar mecanismos de autorregulación del mercado y controlar los precios, evitaría campañas fraudulentas. El 2018-2019 será un período para las exportaciones y deberá apostarse por la calidad. La meta de España es consolidar el mercado nacional e incrementar el consumo internacional.

Además, este año el país tiene estimado aumentar la producción de aceite ecológico, producir al menos 22.000 toneladas más. Su impulsó estará dado en Córdoba, Granada, Huelva, Sevilla y Jaén.

Pero en España no solo aumentará la producción y comercialización de aceite de oliva, sino también el empleo. Se han hecho proyecciones de la mano de obra empleada en las labores de cultivo y recolección de la aceituna. Se estima que la presente campaña requerirá cerca de 18,7 millones de jornaleros, en su mayoría hombres. El dato de la Encuesta sobre la Estructura de Explotaciones Agrarias prevé que se trata de 19,7 más empleos que en la campaña anterior.

Contrario a las tendencias en el continente, a España le espera una gran campaña que saldará los costes de producción y ofrece dejar buenos dividendos.