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Siempre se ha hablado de lo significativo que es para el planeta el ahorro de agua. Sin embargo, el tema cobra especial relevancia en España, pues la región experimenta uno de los momentos más secos de su historia.

Desde 1965, el país ibérico no había vivido un año con tanta sequía como el 2017, explica la Agencia Estatal de Meteorología. Por esta razón, se han tomado diversas medidas para lucha contra este fenómeno.

«El agua nos da la vida. Cuidémosla», es el eslogan de la campaña que promueve el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, en un afán por crear conciencia en la ciudadanía. Aunque el gobierno español ha decretado leyes para poder usar cuencas hidrológicas adicionales que permitan aumentar las concentraciones del vital líquido, lo principal es que la comunidad haga un uso racional del agua.

No ha llovido lo suficiente para que las reservas estén a tope y cada gota cuenta. Por ello entre las acciones que se pueden adoptar, está el ahorro desde casa.

El ahorro del agua es asunto de todos

Muchas veces no se hace un uso eficiente del agua. Se despilfarra y el problema de la sequía se agrava con situaciones que pudieran parecer insignificantes. Por ejemplo, tener una fuga en la tubería o en el grifo, ocasiona una pérdida de hasta 30 litros a diario.

Prácticas como cerrar la llave cuando nos cepillamos los dientes o nos enjabonamos en la ducha, hacen la diferencia. A la hora de hacer la colada, lavar una carga completa de ropa supone un ahorro de hasta tres mil litros mensuales.

Sólo entre octubre y diciembre de 2017 las precipitaciones disminuyeron un 43% en comparación a otros años. La situación es grave. Descuidarse no está permitido, alertan los organismos que gestionan este bien que se ha vuelto escaso.

Con implementar pequeños cambios en el uso doméstico se puede hacer un gran aporte, que no sólo beneficiaría a los españoles, sino también al ambiente en general.

Desde la administración pública se trabaja en mejorar los procesos de gestión y planificación para que este tipo de fenómenos naturales impacten lo menos posible a los ciudadanos. No obstante, es vital que todos colaboren en materia preventiva, pues generalmente se requiere de un protocolo y de ciertos procedimientos burocráticos que retrasan los planes de acción para combatir la falta de agua.